Las relaciones entre las personas requieren varios componentes para que sigan intactas a pesar de la distancia, el diálogo es un factor fundamental a la hora de estar lejos de nuestros seres queridos.
Las personas que hemos tenido la oportunidad de viajar al exterior para perfeccionar algún idioma, trabajar o vivir las experiencias de otras culturas, nos hemos encontrado con miles de dificultades al querer entablar comunicación con los seres queridos que dejamos en nuestro país.
Por la distancia es muy común que las relaciones se debiliten e incluso lleguen a su final, este es precisamente el caso de Juan Camilo, un colombiano que viajó a Estados Unidos hace más de 5 años y quien perdió al amor de su vida con su partida.
Era febrero de 2007 cuando, tras graduarse de una universidad de Bogotá como ingeniero industrial, obtuvo una beca de estudios en el MIT, al recibir la noticia, no cabía de la felicidad. En ese momento su relación estaba de maravilla e incluso había planeado pasar las vacaciones de verano con su novia, con quien anhelaba estar el resto de su vida. Así, Juan Camilo cogió un avión y se fue a estudiar, cumpliendo sus sueños.
Estando allá, se conectaba a Internet cada semana. En algunas ocasiones utilizaba una tarjeta prepagada con minutos para hablar a Colombia, pero todo eso lo empezó a llevar hacia un grado de estrés que, él mismo confiesa, nunca había sentido. María Paula, su novia, para poder hablar con Juan Camilo tenía que cuadrar citas con varios días de anterioridad, quedar a horas específicas y llevar una agenda milimétrica procurando no perderse la llamada semanal.
Las diferentes ocupaciones de ambos hicieron casi nula lacomunicación, siendo este el inicio del fin de la relación, comenzaron a alejarse y finalmente tomaron la decisión de darse un tiempo para pensar las cosas, un espacio que terminó en la ruptura definitiva.
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