l humor, la política y el retrato de una sociedad llena de contradicciones y que vive entre el exceso, el miedo y la tradición son algunos de los elementos que identifican la cinematografía italiana.
Precisamente para hacer una panorámica de esos temas y el estado en que se encuentra el cine de ese país se realiza el primer Ciclo de Cine Italiano (ItalCine), que comienza este viernes y se extenderá hasta el próximo 5 se junio en Bogotá, para luego itinerar por Medellín, Cali y Barranquilla.
Se trata de una muestra de 13 largometrajes que reflejan parte de la cultura y las obsesiones de una Italia que ha mantenido encendida la cámara de cine, sin perder las influencias de los dramas, las cintas cargadas de mucha tensión y el humor, elementos que marcaron las décadas de los 60 y los 70.
En el ciclo se podrán apreciar experimentos de alto valor metafórico y social, como el filme 'César debe morir' ('Cesare deve morire'): un docudrama de ficción –ganador en la Berlinale 2012– en el que un grupo de presos se dedica a montar la puesta en escena de Julio César.
Así mismo, 'Ha sido el hijo' ('È Stato il Figlio'), que muestra a una familia que pretende asegurar una indemnización y termina atrapada en una deuda, al igual que Hombres al dente, en el que un hombre que ha decidido contarle a su familia que es homosexual tendrá que lidiar con el ambiente conservador que rige entre sus cercanos.
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