Después de que el domingo pasado una menor fue atacada por un caimán aguja, la oficina de Parques Nacionales acaba de lanzar una alerta por la presencia de caimanes en el parque Tayrona.
Muchos habitantes de la región han reportado la presencia del animal en esta área protegida, donde por las buenas condiciones ambientales los reptiles han regresado a sitios donde antes no se veían. Al parecer, según las primeras indagaciones, la niña que fue agredida por el animal habría estado en un lugar que está vedado para los visitantes.
Por eso, se pide a los moradores respetar los sitios que están cerrados para hacer caminatas. Los avistamientos del reptil se han hecho en zonas como Los Naranjos, Cañaveral, Arrecife, El Cabo, Cinto, Gairaca y Chengue.
Los caimanes de este tipo no son agresivos a menos de que sean molestados, Por eso, biólogos de Parques Nacionales y de la Corporación Autónoma Regional del Magdalena (Corpamag)recomiendan que si uno de estos ejemplares es visto, se debe mantener una distancia prudente y no hostigarlos. No se debe nadar en lagos donde haya caimanes, tampoco deben ser alimentados ni deben ser provocados arrojándoles objetos.
Los cocodrilos son territoriales y podrían ser agresivos sin son perturbados en época reproductiva o de anidación.
El Caimán Aguja ó del Magdalena (Crocodylus acutus) es una de las seis especies de cocodrilos que se encuentran en el país. Se conoce desde el sur de la Florida, en EE.UU., pasando por América Central. En Colombia, vive en los valles de los ríos Magdalena, Atrato, Sinú, San Jorge, Cauca y en complejos humedales de la costa Caribe y el Pacífico. Esta especie ha sido descrita como 'En Peligro Crítico' de extinción.
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